Sugeiri Cristian

Sugeiri Cristian

lunes, 21 de julio de 2008

solo desahogos

Cierro los ojos y echo un vistazo por mi existencia...siento, pienso y abruptamente me invade una sensacion de desespero y nostalgia.


cuan añoranzas días aquellos, cuando todo brillaba con los colores más frescos y hermosos,
cuando cada suspiro era complice de una alentadora historia de amor;
Feliceses aquellos momentos en que el sustito en el estomago aun se paseaba por estos lados.


Ya no resuellan más los recuerdos, pues su olor a olvido me bloquean los sentimientos en un mar de pensamientos apriori, todos a la vez y al final no se cual pense....aveses creo perder el rumbo de la realidad, porque sencillamente me aferro a mis iluciones y las siento tan verdaderas que las confundo.

he buscado el agua para calmar mi ansiedad, talvez no he sabido el verdadero camino que debo tomar para encontrarla, oh quizas siempre la he tenido frente a mis ojos sin poderla ver jamás...quisas es por las tantas veses que he buscado la luz y el brillo del sol encontrando siempre una espesa y sobria oscuridad, que he quedado totalmente ciega a la vida.

Oh por las tantas veses que he escuchado esas voces que enloquecen y torturan mi existir que ya estoy sorda por su causa; mismas aquellas que me llenan de un vacio gigantesco y detengo el paso para sondear un momento por la soledad en que vivo, pues aun cuando estoy rodeada de un sin numero de personas es tan evidente que estoy sola, que me espanto.

Amor verdadero cuanto falta me haces.
cuanto necesito sentirte otra vez y saber que aun estoy viva, que este color marchito que llevo en el alma se sorprenda con ramitos tiernos y verdes como la esperanza que aun tengo de sentirte una vez más....aunque mucha veses te pierdo en el camino de las angustias y las señales de la realidad traicionera de los tiempos modernos.

Quiero seguir aferrada a las iluciones de que aun existes en algun lugar esperando por mi,
quiero pensar que vale la pena la espera en este mundo insierto de realidades falaceas; donde somos un estereotípo de sombies enagenados, que no conocemos ni nusestras propias sombras reflejada.

Quiero encontrarte ya oh simplemente descubrir tu rostro, pues la soledad es mala consejera para el obtimismo.


Sugeiri Cristian

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